Ocho referentes de arquitectura en hormigón
FECHA
23.12.2025
El hormigón tiene fama de ser un material seco, gris y un poco “bruto”, pero cuando pasa por las manos adecuadas se convierte en una herramienta de expresión muy interesante. Es casi como la arcilla de los arquitectos contemporáneos: flexible en sus posibilidades, contundente en su presencia y capaz de generar atmósferas únicas.
Ahí es donde destacan figuras como Luciano Kruk, que lleva años demostrando que la rudeza del hormigón puede convivir con la suavidad del paisaje. Su Casa L4 es una joya: parece un bloque geométrico perfectamente colocado entre los árboles, como si la naturaleza lo hubiese aceptado sin cuestionarlo. Las sombras profundas, los planos casi levitantes y la austeridad material transmiten una calma sorprendente.
En un registro completamente distinto se mueve Paulo Mendes da Rocha, un maestro de los grandes gestos estructurales. Su mítico MuBE en São Paulo es un canto a la monumentalidad sin arrogancia: una enorme losa suspendida que redefine el espacio público y demuestra que el hormigón también puede ser ligero… o al menos parecerlo.
La narrativa del hormigón cambia radicalmente con Lina Bo Bardi, que entendió este material como un medio para acercar a las personas, no para alejarlas. En el SESC Pompéia, el hormigón forma parte del tejido social: conecta, invita, abraza. El espacio se transforma en una mezcla entre fábrica, plaza y centro cultural vivo, lleno de pasarelas que cruzan el aire como puentes improvisados. Nada es decorativo; todo es funcional y afectivo.
En línea con esa sensibilidad hacia el entorno, aunque desde un lugar mucho más introspectivo, BAK Arquitectos demuestran en su Casa de Hormigón de Mar Azul cómo un material tan rotundo puede dialogar con el bosque sin imponerse. La casa se presenta casi como una ruina contemporánea colocada con suavidad entre los pinos: el hormigón se mezcla con la arena, con la luz, con las sombras del bosque. No intenta dominar, sino pertenecer.
El viaje continúa con arquitecturas que exploran lo emocional desde la materia. Ahí aparece HW Studio, cuyo proyecto La casa entre la colina es pura atmósfera. El hormigón se entierra parcialmente, se protege y genera un espacio silencioso, casi sagrado. Dentro, uno siente que la casa susurra, que te invita a bajar el ritmo, a mirar hacia dentro. Es una arquitectura que se experimenta más que se observa.
En contraste, pero con la misma delicadeza, Marcio Kogan presenta su Casa Ipes, una obra que mezcla hormigón, vidrio y madera como si fueran ingredientes de una receta perfectamente equilibrada. El hormigón aporta carácter, el vidrio suaviza todo con luz tropical y la madera le pone la calidez final. Kogan demuestra que el hormigón no tiene por qué ser agresivo: puede ser elegante, refinado y hasta sensual.
Y si hablamos de maestros del silencio arquitectónico, no pueden faltar Aires Mateus y Tadao Ando. La Casa en Monsaraz de Aires Mateus es prácticamente una escultura habitable: hormigón blanco, luz controlada, vacíos que parecen tallados a mano. Sus espacios interiores son como cavidades luminosas que respiran, donde cada sombra tiene sentido.
Y finalmente, el inconfundible Tadao Ando, que ha hecho del hormigón su firma. Su intervención en Punta della Dogana, en Venecia, es un ejemplo magistral de cómo combinar lo antiguo con lo nuevo sin que haya un choque, sino un diálogo respetuoso y elegante. Ando pule el hormigón hasta convertirlo en un material casi espiritual: suave al tacto, perfecto en sus juntas, exacto en su geometría. En este proyecto, el hormigón no compite con la historia, sino que la realza.
Ocho arquitectos, ocho maneras de entender un mismo material y un montón de emociones que caben dentro de algo tan aparentemente simple como el hormigón.
MArch Valencia. Arquitectura y Diseño
© 2025 MArch Valencia. Arquitectura y Diseño
Política de privacidad | Política de cookies | Condiciones de uso
<p class=»leyenda» style=»color: #363636″>En el contexto del Módulo 05_Producto, los estudiantes del programa MArch han contado con la participación de Asier Mateo, arquitecto y fundador de la marca de relojes Lebond.</span></p>


















